La marcha congregó más de 700 personas que recorrieron el centro del distrito, pero no lograron llegar hasta la puerta del municipio a causa de un desmedido operativo de vallado interpuesto por las fuerzas de seguridad, una postal similar a la de anteriores oportunidades en que la comunidad de Tigre intentó manifestar su desacuerdo con el gobierno local en las puertas de la municipalidad. Una vez más, el edificio permaneció vallado y con efectivos de la policía bonaerense detrás e impidiendo el acceso de los vecinos.
Durante la jornada, también se repudiaron los recurrentes casos de violencia institucional que suceden en el distrito y se recordó a sus víctimas.
"Resulta paradójico que el municipio tenga una Secretaria de Protección Ciudadana que reclute ex policías sospechados de gatillo fácil y los proteja ocultando su prontuario. Se están olvidando de darle seguridad a los ciudadanos de Tigre", expresó el presidente del Bloque de concejales del FPV, Federico Ugo.
El diputado nacional Leonardo Grosso participó de la jornada y marchó junto a representantes de organismos de derechos humanos y víctimas y familiares de la violencia institucional, bajo la consigna "Justicia, despido al inspector Sosa, y apertura y revisión de todos los legajos de inspectores del COT".
"No podemos tener un cuerpo parapolicial en el municipio. Si queremos aportar en la prevención del delito y protección ciudadana hay que construir políticas de Seguridad Democrática que combatan el delito, respeten el derecho y le lleven tranquilidad a los vecinos", resaltó Ugo.
Los organizadores de la movilización además reclamaron una reunión con el intendente Julio Zamora y que se haga pública la resolución municipal que despide al inspector agresor Sosa.
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